“Es hora de cambiar el País, pero el cambio debe empezar en
nosotros mismos" – DAVID VÁSCONEZ –
Haciendo un recuento desde mi
niñez, cuando la “Política” era tan solo
una palabra que no tenía importancia y la utilizaban únicamente “los grandes”
para justificar un norte que no entendía. Me pongo a pensar en estos días. ¿En
qué estamos fallando, para que la sociedad no quiera estar interesada en este
camino en el cual los únicos que se atreven a incursionar en la política sean
los mismos de siempre? He llegado a determinar que la respuesta no es simple y
tiene una amplitud que me obligó a conversar con mucha gente para comprobar si
estoy solo en esta sociedad.
Las necesidades de los ciudadanos
son extensas, pero nadie se atreve a manifestarlas, por el miedo a encontrar
diferentes puntos de vista y lo que no saben es que esto siempre va a existir
porque somos humanos, es decir, individuos únicos. Lo triste es que por esta
razón se reprimen mentes brillantes con ideas innovadoras que podrían ser de
mucha utilidad para el desarrollo de este país, pero al tener cierto tipo de
filtros y creencias sobre la política, el bloqueo es automático y la soledad
política nuevamente se aferra a ellos. También debemos saber que no es una
generalidad en realidad existen personas que se arriesgan a llevar su ideología
a un nivel superior, luchado contra viento y marea, sin ganar ni un centavo en
dinero, pero ganando mucho en cuanto se refiere a crear conciencia social que
resulta mucho más valioso que un cheque con un número y muchos ceros. Me
incluyo en este grupo de valientes, apasionados por la política que seguimos
pensando en un futuro diferente, que por el simple hecho de sentirnos tomados
en cuenta, plasmamos nuestras palabras.
Mucha gente que se identifica,
replica nuestras opiniones, demostrando que existe un interés, un interés de
unos, que nuevamente cae en el vacío de soledad, arrastrados por otros.
¿Cuántas veces hemos visto esto, los que no estamos cegados por discurso
pintoresco? ¿Y cuántas veces hemos sido parte del grupo de los que se quejan,
pudiendo estar en el grupo de los que lo intentan y actúan con decisión?
Es por esto, que analizando el
origen de lo que debería ser la participación ciudadana, veo a los jóvenes que
actualmente tienen la capacidad de elegir un presidente haciendo uso de sus
derechos como ciudadanos desde los 16 años, que ni se preocupan por el consejo
estudiantil del lugar donde estudian, -que en muchos casos tan solo termina
siendo un concurso de popularidad-, peor aún de algo más complejo como un país.
Sin embargo, ya toman las decisiones sobre la dirección de una nación. Y es
aquí donde debemos fomentar la participación, haciendo que los jóvenes se
interesen por el “ahora” que es el presente y por el futuro. Creando nuevos
sistemas donde se incluya a este segmento que está en pleno crecimiento y en un
estado independiente, incluso para que se lo haga de una manera transparente.
Naturalmente es un público objetivo que está en plena formación y los frutos se
verán a mediano o largo plazo.
Cuando se ve a los actuales
partícipes dentro de la sociedad es importante analizar cómo lo están haciendo,
ya que por llamar la atención comenten actos netamente vistosos o escandalosos,
pero sin trascendencia, a las que yo las llamaría “tonterías”. Esto se da por
el mal uso de la “libertad de expresión”, y lo nombro de esta manera porque
muchos se escudan detrás de esta palabra que se la ha prostituido. Ahora,
debemos tomar en cuenta que es algo que debemos hacerlo con responsabilidad y
siempre defendiendo nuestra ideología, mas no la de otros porque estaríamos
perdiendo autenticidad. Es aquí donde se generan los filtros y creencias que
van a fomentar el miedo a expresarnos, mermando opiniones valiosas de personas
que lo harían a conciencia.
Es imprescindible y urgente que
participemos de manera responsable, creando conciencia, debemos motivar a
nuevas y actuales generaciones, ya que solo de esta manera podemos ir
construyendo la institucionalidad del Estado con una fiscalización activa, para
volver a creer en la justicia y no seguir viviendo ni un minuto más en los AÑOS
DE SOLEDAD POLÍTICA.
Te invito a plasmar nuestras palabras
en acciones para construir un futuro diferente.
Escrito por:
David Vásconez
Fundador
VOCEROS
Twitter: @david_vasconez